Navidad, Blanca Navidad.

La Navidad es sin duda para pasarla en familia. Eso es lo que se hace acá al menos en mi casa. Se come, se ríe, se conversa, se va a mirar al viejito pascuero y al rato se entregan los regalos. Y después se conversa otro rato y calabaza calabaza. Siempre era así. Salvo este año. Donde se hizo lo mismo, pero antes del calabaza calabaza, escuchamos a los Jaivas y cantamos el Mira Niñita y Todos Juntos. Después salieron las cosas de cotillón que tenía guardadas para el Año Nuevo.

Bailamos, nos tomamos fotos disfrazados, mi abuelita se puso lentes oscuros, gorro e hizo que fumaba. Lo que nos provocó mucha risa. Después nos pusimos las orejas gigantes del cumpleaños de la Clau, me disfracé de Rey Mago. Nos reímos mucho.

Ayer 25 fuismos donde mi abuelita. Estabamos todos los que faltaron el 24 en la noche. Nos reímos mucho como es nuestra costumbre. Y después en patota, partimos a ver las fotos de la noche anterior. Nos reímos mucho. Me di cuenta que tengo una familia muy cool. En realidad creo que mi familia es mega BKN y que sin duda alguna nos deben envidiar mucho porque siempre estamos juntos.

Después todos se fueron a ver a la otra parentela a la entrega de los regalos del amigo secreto pero no fui. Tenía otra cosa más importante que hacer. Así que entregué el regalo y partí.

Fue la decisión más inteligente que pude haber hecho, no tanto por el regalo, sino por la compañía...

Me llegó un regalo ultra mega demasiado superfragilisticamente bakán. Mis pantalones de golf, un "roboc" que mueve los brazos, la cabeza y sus pies, una bolsa de dulces y un tazón. Ese tazón ya está todo el mundo advertido que es mi tazón y nadie más lo puede ocupar.

Sin contar una tarjeta que me emocionó, pero por no dar a conocer mis emociones, opté por no expresarla. La palabra BIENVENIDO, es primera vez que tiene otro contexto. Y ese contexto me agrada. Me hace feliz.

Sin duda esta Navidad fue lejos la mejor Navidad de mi vida.