Ayer cumplí 24 años. Fue todo lindo.
Llamó gente que jamás me hubiera imaginado. Incluso de la oficina donde estuve trabajando, me llamaron las secres y la señora del aseo: la Carmencita, tan amorosa...
Todo anduvo de perillas. Incluso me hicieron un "homenaje" en un blog amigo, que me provocó lágrimas. Me sirvió para darme cuenta que no soy un ser tan como el ajo, sino que al parecer soy un humano que deja huellas y eso me llena de orgullo.
Pero sin querer, siempre hay gente que te hace cuestionar tus cosas. Como hoy, hace poco rato. Al final, opté por no hacerme mala sangre. Los 24 años se vienen totalmente positivos.
21.12.06
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2 comentarios:
Me disculpo por la precariedad de mi mensaje, ojalá le haya gustado. Lo del teléfono fue un mero olvido, de seguro lo anoté un lugar o papel recóndito, hasta revisé el historial y ohhh, detalle ¡no tenía!.
Rodolfo el reno le dejó algo en mi arbol navideño (que a todo esto parece de juguete)
Y concuerdo con Spica. Parabienes para ud.
clau
obvio amigo y como tu bien dijiste en algun momento existen millones de personas alrededor del mundo que se mueren por conocernos, entonces para qué hacernos mala sangre por seres que no lo merecen?
mucha suerte en tu vida Nico, lo del homenaje simplemente es porque crei y senti la necesidad de hacerlo, y necesidad no significa compromiso, sino simplemente el cariño que tan necesaria significación merece.
te quero muucho amigo...uff!! montones!!
suerte en los años venideros!!
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