Parece que las gotitas estas están haciendo su efecto... es que ya definitivamente esto que tengo acumulado, está logrando al fin salir al exterior de mi cuerpo. Espero que esto me ayude a lograr volver a ser el que siempre fui... un niñito risueño, que no escondía sus penas detrás de una cara feliz o de un chiste.
Tengo algo que oprime el pecho, y es algo que de verdad jamás había sentido. Quizás es porque salí de la U, y ya paso todo el día en la casa. No tengo obligaciones relevantes que hacer. Eso quizás me hace pensar más de lo que acostumbro hacer. Quizás eso me hace recordarte y aunque no quiero hacerlo más, siempre te me apareces. Siempre estás ahí en mi pensamiento. Y logras que siempre yo termine pidiendo que estes bien, que no tengas grandes problemas y que logres ser feliz, pues empezaste una nueva etapa y en esa etapa yo no estaba contemplado. Pero a pesar de eso anhelo tanto que seas feliz, yo creo que también lo seré, porque sin duda lo fui contigo. Creo que en un poquito más de tiempo, voy a poder a encontrar la ventanita que me va a llevar a ser feliz.

Mientras tanto Ismael canta, y me hace sentir tan identificado:

"Quiero volar, lejos de aquí escapar.
Dime, mi bien, quién me llorará
si me dan alas y echo a volar.
Quiero dormir,
no quiero despertar,
quiero ser la lluvia al otro lado del cristal,
quizás alguien me espere en la oscuridad".